Ojo con el ENOJO

Hoy les compartimos algunas citas que valen la pena leer y/o recordar acerca del enojo; nos ayudarán pues todos somos propensos a tener ese tipo de sentimiento que puede acabar, destruir, ofender, lastimar y herir a los demás.

Aquí están:

• El enojo no resuelve nada ni edifica nada, pero puede destruirlo todo-Lawrence Douglas Wilder 

• Un hombre es un tonto si toma como insulto algo que no tuvo la intención de serlo-Heber J. Grant

• Nadie puede hacernos enojar; es nuestra decisión.-Thomas S. Monson 

• Cuando no enojamos, nos metemos en problemas- Gordon B. Hinckley

• La ira es la causa de gran número de maldades.- Gordon B. Hinckley

• ...Después, pequeños hechos sin importancia conducen a la crítica. Las pequeñas fallas se exageran, convirtiéndose en grandes torrentes de críticas mutuas; la relación se rompe, se separan, y luego, con rencor y amargura, se divorcian.- Gordon B. Hinckley

• ..Muchos de nosotros hacemos un gran escándalo por pequeñeces; ¡nos ofendemos tan fácilmente! Feliz es el hombre que puede pasar por alto los comentarios ofensivos de otra persona y sigue adelante. -Gordon B. Hinckley

• ..les suplico que dominen su carácter; que sonrían, lo cual borrará el enojo-Gordon B. Hinckley

• Solemos ver el mal genio como una debilidad que no hace mal a nadie. Nos referimos a él como si se tratara de una mera flaqueza en nuestra naturaleza, una falla en la familia y un asunto de temperamento, en lugar de verlo como algo que se debe considerar seriamente al medir el carácter de un hombre. Y sin embargo… la Biblia lo denuncia una y otra vez como uno de los elementos más destructivos de la naturaleza humana-Henry Drummond

Para DISCIPLINAR a nuestros hijos

En mi opinión uno de los  aspectos más difíciles de ser padres y madres es el saber disciplinar a nuestros hijos, como saber cuando se está siendo demasiado autoritarios o cuando por el contrario nos vamos al extremo de ser demasiado permisivos. En este post quizas no se especifique las situaciones de cuando si o cuando no se está siendo autoritario o permisivo, o que hacer si el niño hace esto o aquello, en este post sencillamente queremos compartir cuatro (4) citas  y/o historias que nos han ayudado como familia a entender la importancia de la disciplina y de como aplicarlas de la mejor manera, esperamos que les guste.

1.Primero, entendamos que es la disciplina; esta es mi definición favorita:

"La disciplina es amor organizado, y los niños crecen bien cuando existe una atmósfera de amor y hay pautas adecuadas en las cuales basarse en la vida y que les sirven para formar buenos hábitos. Con mucha frecuencia, los niños reciben mas castigos por seguir el ejemplo de sus padres que por desobedecerles, de manera que debemos ser, lo que deseemos ver en nuestros hijos. "1

2. Esta corta historia nos enseña que el disciplinar y enseñar o solicitar algo a nuestros hijos, siempre debe ser con amor, tal y como lo haría nuestro Salvador.

"Cuando nuestra hija menor tenía apenas cuatro años de edad, una noche llegue a casa muy tarde del trabajo en el hospital y me di cuenta de que mi querida esposa estaba muy cansada, lo cual no entiendo, pues solo tenía nueve niños a su lado todo el día. Para aliviar un poco su carga, me ofrecí para poner en la cama a nuestra hijita. La lleve a su habitación y empecé a darle órdenes: “Quítate la ropa, cuélgala, ponte el pijama, cepíllate los dientes, haz tus oraciones”, etc. Parecía un sargento dando órdenes. De pronto, algo pensativa, ella me dijo: “Papi, ¿soy de tu propiedad?”

Mi hijita me enseñó una lección importante esa noche, pues estaba tratando a esa dulce criatura con coerción. El controlar a los niños por medio de la fuerza es una técnica de Satanás, no del Salvador. No, los hijos no son de nuestra propiedad; el privilegio que tenemos como padres es el de amarlos, dirigirlos y luego darles la oportunidad de empezar su propia vida por si mismos."2

3.Dejemos a nuestros hijos disfrutar de su niñez.

"....Quizás me haya enseñado ortografía, gramática y matemáticas, pero sobre todo me enseñó a disfrutar de ser niño. En su clase, estaba bien deletrear mal una palabra de vez en cuando; ‘Tendremos que practicarla más’, solía decir. Estaba bien si algo se derramaba, se nos rompía o si hacíamos un borrón; ‘Lo arreglaremos y lo limpiaremos’, solía comentar. Estaba bien tratar, estaba bien esforzarse, estaba bien soñar y estaba bien disfrutar de esos placeres que provienen de las cosas insignificantes que sólo a los niños les parecen emocionantes”.3

4. "A fin de comunicarnos con el corazón de un niño, debemos conocer sus necesidades. Si oramos para conocer esas necesidades, las palabras que digamos podrán tener el poder de penetrar su corazón. Nuestros esfuerzos se magnifican cuando procuramos la guía del Espíritu Santo."3

"No pueden esperar realizarlo solos; necesitan la ayuda del Cielo para criar a un hijo del Cielo: su hijo o hija es también hijo o hija del Padre Celestial." Gordon B Hinckley

En conclusión:

Organicemos el amor que tenemos por nuestros hijos, esforcémonos por conocerlos y entenderlos mejor, por corregirlos con palabras y actos de amor, nunca con la violencia, dejemoslos y permitámonos junto con ellos  disfrutar de su niñez y de "esas cosas insignificantes que a los niños les parecen emocionantes".Por supuesto que hay momentos en los que se les debe llamar la atención, pero siempre debemos demostrar más amor cuando los corrijamos. "reprendiendo en el momento oportuno con severidad, cuando lo induzca el Espíritu Santo; y entonces demostrando mayor amor hacia el que has reprendido, no sea que te considere su enemigo" Dy C 121:43

“... les imploro que enseñen y dirijan mediante el espíritu de amor y tolerancia hasta que puedan conquistar a los hijos. 

Si éstos son rebeldes y difíciles de gobernar, sean pacientes con ellos hasta que puedan conquistarlos por medio del amor, y así habrán ganado sus almas y podrán moldear su carácter como lo deseen”

Joseph F. Smith

Citas e historias tomadas de:

1.La felicidad se hace en casa -ELDER LEGRAND R. CURTIS
2.Escuchad para aprender- RUSSELL M. NELSON
3.Las palabras que expresamos - ROSEMARY M. WIXOM